Me asombran las personas que no dudan. ¿Es posible no dudar? Veo a seres cósmicos, diría absolutos, exudando certezas y una energía que asusta, sobre todo cuando ellas, las certezas cósmicas, se refieren a nuestros destinos y nos cuentan un mundo que no conocemos aunque habitamos. Porque trasegamos otro mundo, donde cabe la duda.
Los dueños de la verdad no cejan e imponen admonitorios su pensamiento de acero inoxidable, condenando, alimentando escarnios y violencias. No acuerdan, solo vociferan órdenes.
Mientras tanto vamos muriendo de a poco. Y a nadie le importará demasiado. Los cósmicos seguirán. Nada habrá ocurrido. Solo palabras.
3 comentarios:
Para los dueños de LA -SU- verdad, lo mejor es ser sordos.
Abrazo
Jeve.
¿Mudos también?
Jajajajjaaa, "Haz lo que yo digo mas no lo que yo hago!". MI comentario fue plenamente retórico, ya quisiera ser sorda, pero no puedo, y mucho menos muda! Me joden hasta la médula los que creen que en su poder tienen la verdad revelada.
Y bué, Francisco, hay tantos... Tampoco la voy con el famoso "Si no puedes con ellos, úneteles", así que seguiremos siendo con esta gente, eternos antagónicos.
Abrazo
Jeve.
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