30/8/08

Paco mediático

Tomás Abraham es uno de los pensadores contemporáneos de nuestro país a los que suelo leer y escuchar con atención. Propongo la lectura del artículo publicado en su blog Pan Rayado que titula este post. Ir al artículo.
Hago una breve aclaración para el lector desprevenido que no habita la Argentina y, vaya uno a saber por que casualidad, aterriza en este minúsculo espacio. Nadie sabe definir muy bien qué es lo que que contiene el "Paco".
Lo que todos sabemos muy bien es que se trata de una droga basura y letal. Producto residual del procesamiento de otros estupefacientes que lisa y llanamente "quema" el cerebro de quienes lo consumen, que obviamente son los jóvenes (y niños) más desprotegidos de nuestra sociedad. En otras palabras: la droga de los desamparados.

29/8/08

Reflexiones de un viernes a la tarde


FALACIA. (Del lat. fallacia.) f. Engaño o mentira con que se quiere dañar a otro. ll Hábito de usar falsedades en daño ajeno.

FALAZ. (Del lat. fallax, -acis.) adj. Que obra con falacia. ll Dícese de todo lo que halaga y atrae con falsas apariencias.

MENDAZ. (Del lat. mendax, -acis.) adj. y s. Mentiroso.

IGNORANTE. (Del lat. ignorans, -antis.) p. a. de Ignorar. Que ignora. II adj. y s. Que no tiene noticia de las cosas.

“En su primer mensaje ante al Congreso el doctor Illia señaló algunos aspectos fundamentales de su programa de gobierno: respetar la independencia del Poder Judicial, respetar las autonomías provinciales, eliminar la desocupación obrera, aprovechar plenamente todos los factores productivos, defender el valor de nuestra moneda, anular los contratos petroleros con empresas extranjeras, mejorar el nivel tecnológico del campo, modificar el régimen de la tierra para facilitar el acceso a la propiedad de los auténticos productores por medio de un sistema de créditos adecuado, obtener mayores saldos exportables para completar nuestro desarrollo industrial, buscar nuevos mercados sin exclusiones ideológicas, fortalecer la acción gremial pero alejarla de su instrumentación política partidaria, ampliar las posibilidades en educación y cultura para la mayor cantidad de gente, reafirmar la política americanista del radicalismo, procurar la integración del territorio nacional, reclamando por el derecho sobre las Islas Malvinas y la Antártida Argentina y formular un llamamiento a las Fuerzas Armadas para su reinserción en el proceso democrático.”
Para mayor información, por favor ver la página que se indica (o acudir a cualquier fuente de información razonablemente equilibrada).

Esta mañana debía tomar una evaluación a los estudiantes que sufren tres veces por semana mi “Introducción a la Construcción” en el colegio pseudo técnico que alguna vez supo formar cuasi profesionales y, hoy por hoy, nadie sabe muy bien la razón de su existencia salvo la de tener por unas horas a los adolescentes entretenidos (o aburridos) y más o menos alejados de “la calle” y, claro está, la de justificar una cada vez más elefantiásica estructura de “cargos” en los que se ejerce la lucha docente, así como la burocrático directiva, que crece más, porque rinde mayores dividendos y posibilita la 4 x 4.

Los párvulos, 15 años (algunos 16), plantearon el ya histórico recurso para zafar de la parada hasta nuevo aviso: “Profe, hoy tenemos oral de historia… es muy difícil… ¿podemos hacer la prueba otro día?”

Debo confesar que a esta altura de mi vida quien más disfruta de esta suerte de “choque entre dos mundos”, el de los párvulos y el de quien escribe, que ya va doblando el codo de los cincuenta y es casi un “sub sesenta”, soy yo. Es que la experiencia resulta un edificante y muy constructivo juego. En fin, se presentó la oportunidad y allí fuimos, a jugar.

Pregunté, poniendo un poco de suspenso (el suspenso condimenta, hace que el guiso salga más rico), de que se trataba o cuál era ese tema tan complejo que debían enfrentar (por lo del oral de historia), como para que no pudiéramos responder o explicar las razones por las que un ladrillo se pone encima de otro, trabando las hiladas entre sí.

La desperonización profe, contestaron los más rápidos. ¿Y eso qué es? No sé, es aburrido, dijo una jovencita. Otro arrimó un lo que pasó con Illia.

¿Illia?, pregunté. ¿Saben quién fue ese señor? Silencio de radio...

No viene a cuento el detalle del diálogo múltiple que se generó (y deliberadamente busqué que así fuera, toda vez que este tema me parece mucho más importante que las hiladas de ladrillos de una estúpida pared), pero confieso que ha sido rico y esclarecedor, al menos para mí. A los chicos de hoy, mendaces de ocasión (y si no lo son pecan por ignorantes) les enseñan falacias configurando un contexto cognitivo falaz. Lo repito: se miente a nuestros jóvenes, decididamente se los está engañando. Eso sí, los mendaces luchan.

Un tanguito

El sábado pasado nos enteramos casualmente que esa misma noche, aquí -en Ushuaia- se presentaba un dúo de músicos rosarinos cuyo repertorio está basado en una completa lista de milongas, valses y tangos a los que podríamos llamar clásicos, esto es los mejores o los que a todo el mundo le gusta escuchar. La propuesta se ofrecía atractiva y allí nos fuimos.
El dúo, Tango al Sur, está compuesto por Alicia Petronelli (bandoneón) y Pepe Ferrer (guitarra), dos músicos excelentes. No nos defraudaron, al contrario, además de tocar muy buena música, mostraron ser verdaderos profesionales. Ya voy a este punto pero, por favor, métase el lector en la página web de este grupo, seleccione la opción "audio" y escuche un poco. Está bueno.

Ahora la "anécdota". ¿Se imagina el lector cuántas personas acudimos al concierto que, dicho sea de paso, debió ser promovido por la Subsecretaría de Cultura de la Provincia? Eramos seis... o siete, no estoy seguro en que categoría colocar a la persona responsable del espacio utilizado en esta circunstancia, que no fue otro que el mini auditorio que funciona en la ex panadería del ex penal de Ushuaia, hoy un museo y galería de arte.
Por suerte, sea porque la cosa venía fría (sonaba a papelón), sea porque tenían ganas de escuchar buena música, sobre el gong aparecieron la Sra. Gobernadora de la Provincia y parte de su familia, el Sr. Ministro de Economía (o de lo que sea, pero un ministro), con su esposa y, un ratito más tarde el Subsecretario de Cultura y un par más de allegados a quienes no pude identificar. Total del "rejunte" unas 18 a 20 almas. O sea nadie, si consideramos que en esta ciudad hay muchas -insisto, muchas- personas (a varias las conozco personalmente) que se la hubieran pasado fenómeno escuchando a estos músicos.
Lo cierto es que Petronelli y Ferrer, a la hora señalada, se tocaron todo como si estuvieran -como estuvieron- en el cierre del Festival Internacional de Tango tocando con Mederos. Nada, profesionales en serio.
Lo que me pregunto, como muchas veces me he preguntado, es cómo se afectan los recursos disponibles (no hablo exclusivamente de dinero) para la difusión de este tipo de encuentros. Hubiera bastado un par de avisitos por la T.V. oficial, tan del Estado Provincial como la Subsecretaría de Cultura, para que la noche del sábado pasado hubiera sido algo más "caliente". No sé, me parece... Seguro que mi apreciación es errónea y no entiendo nada de todo esto, para eso están nuestros representantes.

20/8/08

Tein calma

Cuando tengas ganas de mandar a cuanto ser se te ponga enfrente a un lugar relacionado con maternidad y, por ahí, estés a punto de hacer algo de lo que te vas a arrepentir toda la vida... Pará. Escuchate esto. Estoy seguro que te va a servir.

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Ya que estamos, un comentario. Es bueno el amigo Nitin Sawhney. A Will Young no lo tenía. Canta bien el muchacho. Y bueno, uno se va oxidando...

18/8/08

Hace veinte años...

La unión con SAS que no fue

La propuesta de Rodolfo Terragno para Aerolíneas Argentinas implicaba establecer un convenio por el cual el Estado se quedaba con el 51 por ciento de las acciones, el 40 por ciento lo tendría la sueca SAS y nueve por ciento quedaría en manos de los trabajadores. El Estado colocaba además al presidente, el vice y a 7 de los 12 miembros del directorio. SAS tendría el manejo comercial, no podía vender ninguna acción ni comprarle ninguna al Estado. Su ganancia dependía de los beneficios que quedaran después de pagar los impuestos. De esa manera el Estado se quedaría con el 70 por ciento de las ganancias brutas. Fue en 1988. En esa ocasión, Eduardo Menem dijo que “el justicialismo no le ha puesto ni le pondrá bandera de remate a las empresas del Estado”. El Congreso, con mayoría peronista, rechazó el convenio.


El párrafo que arriba se transcribe forma parte de un reportaje realizado a Terragno, publicado hoy por Critica de la Argentina. Me parece que vale la pena leerlo.

17/8/08

José Francisco de San Martín


El 17 de agosto de 1850 falleció José Francisco de San Martín, "Generalísimo de la República del Perú, y Fundador de su libertad, Capitán General de la de Chile, y Brigadier General de la confederación Argentina", como él mismo define en su testamento, que suscribe el 23 de enero de 1844 visto "...el mal estado de mi salud", según expresa. Este testamento fue escrito en una simple hoja de papel, sin ceremonias. Curioso, al menos para mí que encuentro en la figura de este hombre (a la que necesariamente sumo la de otro grande, Manuel Belgrano), una humana escala de valores que fundamenta la ética republicana que nos justifica. Curioso, digo, porque por propia boca de San Martín lo sabemos Generalísimo de la República del Perú; luego Capitán General de la de Chile. Finalmente, Brigadier General de la Confederación Argentina. Parece que al Padre de la Patria, no lo apoyaron demasiado por los Buenos Aires que, más que buenos, le resultaron fétidos, por cierto.

Un cretino que no hace mucho ha gobernado este país supo decir alguna vez que “cuando uno decide dedicarse a la política echa su honra a los perros”. Buena autojustificación, aunque falaz. Supo haber hombres por estos territorios que supieron de honra, tuvieron pudor y, ganando o perdiendo, fueron capaces de tomar distancia, aunque se les partiera el alma. San Martín ha sido uno de ellos, aunque no el único. Podría citar a varios hombres y mujeres notables que, a no dudarlo, son los verdaderos forjadores de lo que hoy es un país, el nuestro. Muchos de ellos son considerados hoy “políticamente incorrectos” mientras que otros –tal el caso de José de San Martín o Belgrano- han sido convertidos en un fin de semana extendido, un acto anodino y descontextualizado en las escuelas y una imagen estática en medio de alguna plaza o en algún billete de papel moneda que a nadie interesa toda vez que no tiene, al decir de Manolito, el recordado personaje creado por Quino en torno a Mafalda, “ese color verde…”. Y así nos va.

Y cuando digo hombres y mujeres me refiero exactamente a eso, estrictamente seres humanos, con sus miserias a cuestas, y no a esfinges de bronce. Por humanos han sido grandes y por humanos merecen nuestro respeto. Fueron capaces de honrar los desafíos que la vida les puso por delante a partir de su condición de seres imperfectos. He aquí el punto: se sirve a la Patria siendo seres de carne y hueso que hacen honor a su condición humana, todos los días, sin que sean necesarios estridentes clarines o briosas fanfarrias.

Volviendo a San Martín, José Martí resume de este modo su existencia:

“Un día, cuando saltaban las piedras en España al paso de los franceses, Napoleón clavó los ojos en un oficial, seco y tostado, que vestía uniforme blanco y azul; se fue sobre él, y le leyó en el botón de la casaca el nombre del cuerpo: “¡Murcia!” Era el niño pobre de la aldea jesuita de Yapeyú, criado al aire entre indios y mestizos, que después de veintidós años de guerra española empuñó en Buenos Aires la insurrección desmigajada, trabó por juramento a los criollos arremetedores, aventó en San Lorenzo la escuadrilla real, montó en Cuyo el ejército libertador, pasó los Andes para amanecer en Chacabuco; de Chile, libre a su espada, fue a Maipú a redimir el Perú; se alzó protector en Lima, con uniformes de palmas de oro; salió, vencido por sí mismo, al paso de Bolívar avasallador; retrocedió; abdicó; cedió a Simón Bolívar toda su gloria; pasó solo por Buenos Aires; se fue a Europa, triste; murió en Francia, con su hija Mercedes de la mano, en una casita llena de flores y de luz. Escribió su testamento en una cuartilla de papel, como si fuera el parte de una batalla; le habían regalado el estandarte que el conquistador Pizarro trajera a América hace cuatro siglos, y él le regaló el estandarte, en su testamento, al Perú.”

Me quedo con esto.

16/8/08

Divagues de un sábado a la tarde

Ayer llegó a mi casilla de correo electrónico un mail de mi hija, Soledad. Me envió el vínculo para acceder al blog SOCIOLOGIA CONTRAATACA, en cual se acaba de publicar un post, Babel icónica Muestra en el Once, del cual rescato la fotografía que aquí se reproduce.


Como bien se puede leer en el blog citado y ver en esta foto, nos encontramos con una gigantesca profusión de íconos de los más diversos orígenes, junto a velas, esencias arómaticas y toda una parafernalia de objetos que son profusamente consumidos por distintas razones.

Me quedé con esto dando vueltas en mi cabeza, fueron surgiendo ideas contradictorias. Es que no se trata de una cuestión menor, toda vez que aquí aparece un curioso babel, para mí un emergente de algo trascendente para cualquier ser humano: aquello que no es material y no se comprende.

Es sábado, la tarde es gris pero apacible, estoy en casa divagando un poco y distendido ante la perspectiva de un fin de semana que se extenderá un día más, feriado mediante. Ergo: tengo tiempo y, por tanto, la decisión es escarbar un poco aquí, otro allá. Ya saben, mis asociaciones ilícitas.

Les comento que el sitio que muestra la fotografía se llama, si no me equivoco, La Botica Milagrosa. Esta firma comercial posee al menos cinco locales comenzando por éste, que queda en la Av. Corrientes al 2200, casi esquina Uriburu. No es la única que anda por el barrio del Once. Pasen y vean. Y esto no es nada. Puse la palabra "santerías" en el buscador Google, seleccionando exclusivamente páginas de Argentina. Hagan la prueba, se van a sorprender de lo diverso y extendido de este rubro. Y ni les cuento si nos vamos un poquito más allá de nuestras fronteras: desde Brasil, Italia, Alemania, Israel, España, y varios países más, todos ellos vinculados con nuestra Argentina, se ofrecen exportaciones directas, vía compra "on line", con el carrito y todo, al mejor estilo de Mercado Libre, que naturalmente tiene su apartado con ofertas especiales. Un océano, que digo, un universo completo.

Betriz Sarlo, una conocida intelectual argentina a quien respeto, más allá de no siempre compartir sus puntos de vista, publicó hace un par de años un artículo en el Diario Clarín, de Buenos Aires: La Biblia y el calefón, en una vidriera. Sugiero leerlo.

Luego de leer el artículo de Sarlo tuve el impulso de recorrer los pagos de la Pacha Mama. Me encontré, entre otras cosas, con esto.

Se trata de una de las tantas ermitas expuestas este año en la ciudad de Tilcara, Provincia de Jujuy, en el mes de marzo, coincidiendo con la celebración católica de la Semana Santa.

Las ermitas, genuinas expresiones de la fe popular, eran originalmente pequeños altares y santuarios levantados al aire libre, generalmente en las esquinas o extremos del pueblo. Cuatro palos, un precario techo y un plano de fondo en el que se realizaba la alegoría popular, utilizando hierbas y otras materias básicas, naturales. Con el tiempo se modificaron. Lo que era un santuario con características de refugio, terminó en un simple panel de importantes dimensiones. Así se lo confecciona actualmente. En él se concentra el paciente trabajo de los lugareños. Con flores, semillas, hojas, corteza y elementos similares, dibujan el pasaje bíblico seleccionado.

Aquí no se visualizan Biblias con calefones, aunque sí íconos populares que tratan de lo mismo a lo aludimos al comienzo de este leve y desordenado juego de relaciones en que he metido. Hablamos de aquello que no es material y no se comprende. Agrego: se cree, se teme o sencillamente se necesita, a veces sin poder explicar muy bien por qué.

En tren de divagar un poco más he dado, también, con una publicación académica muy interesante. La Revista de Investigaciones Folclóricas (ver link Peregrinación al Abra de Punta Corral, en Google)

Repasando un poco esta publicación pude leer que "La kreensia en la poder de palavra es uno de los prinsipales del pensamiento majiko en todas las kulturas en todos los tiempos. Palavra dicha non se puede retornar, eya aktua en la realidad i ademas es kapache de krear realidad. Munchas de las maneras de avlar en la kultura sefaradi estan bazadas sovre este konsepto."
(...)
"Por esto ay ke uzar eufemizmos komo los de basho, los mejores de mozotros i simijante. Ademas, giados por la idea ke la palavra es kapache de krear relidad, a vezes los Sefaradim referen a los sidim kon la sintagma pan barato, alkansando anisna dos butos: uno de evitar a mensionar a los sidim, para non trayerlos i otro de kauzar aparensia del pan barato (una koza siempre dezeada), mensionandolo. Anisina tanbien ay ke akavidarse de non maldizir, siendo ke las maldisiones tienen poder de aktuar en la realidad. Por esto, en la kultura sefaradi popular, munchas vezes la maldision viene pronunsiada kon una «klauzula de enbaldamiento». Komo en los enshemplos vinientes: El Dio ke no te mate, El Dio ke no lo tome."
(...)
"De todo lo dicho proviene klaramente ke el kudyo de la kaza i de las kriatura (inkluyendo el kudyo por sus sanedad) eran responsabilidad de la mujer. No es de maraviar, entonses, ke estas mujeres perpetuaron las medikerias i las kuras populares ke sus nonas trusheron kon si de Espanya, adjustandoles unas kreensias i praktikas espandidas entre otros grupos femininos lugarenyos. De la totalidad de tekstos apartenesientes a la tradision bosniaka-sarayli surje la impresion ke las parte de prikantes fueron uzados en la kurasion de kriaturas –o, a lo maksimo, en la kurasion de mujeres febles (prenyadas o paridas). Parese ke solamente rituales mas komplikados komo espanto de la miel o el indulko fueron uzados tanbien i en la kurasion de machos aedados." (1)

No sé ustedes, pero en estos párrafos tomados rápidamente de un estudio referido a creencias populares de la comunidad judía de Sarajevo, encuentro puntos en común con la iconografía (y creencias) de la gente de Tilcara, en una de esas hasta con las de más de un cliente de las tiendas del Once, aunque en el primer caso se hable de la palabra y no de íconos, cosa que es obvia si recordamos las bases tradicionales de las culturas judía y cristiana.

En fin, que hay tela para cortar. El asunto es que sólo tenemos una tijera, la de nuestro ser. El que cree, teme o necesita. También el que engaña, explota o lucra. Ese ser que, en la desesperación e incertidumbre que provocan estos tiempos que corren, se aferra a la esperanza.


El mismo ser que, frente al Universo, no tiene más remedio que hacerse algunas preguntas.


(1)Tamar Alexander y Eliezer Papo; "La poder de palavra: prikantes djudeo-espanyoles de Saray"; Revista de Investigaciones Folclóricas. Vol. 20: 22-45 (2005)

14/8/08

Los feos


Que se mueran los feos, que se mueran los feos
Que se mueran toditos, toditos, toditos,
toditos los feos, que se mueran.

Que se mueran los feos, que se mueran los feos
Que se mueran toditos, toditos, toditos,
toditos los feos, que se mueran.

Yo, yo, yo, yo no soy tan feo
como nadie me quiere, ni modo
también yo me quiero morir.

Que se mueran los feos, que se mueran los feos
Que se mueran toditos, toditos, toditos,
toditos los feos, que se mueran.

Que se mueran los feos, que se mueran los feos
Que se mueran toditos, toditos, toditos,
toditos los feos, que se mueran.

Yo, yo, yo, yo soy muy fea
Soy roñosa y antigua y por eso
también yo me quiero morir.

Que se mueran los feos, que se mueran los feos
Que se mueran toditos, toditos, toditos,
toditos los feos, que se mueran.


Esta notable -por lo espantosa- pieza de cierta poética patética e inimputable aplicada a la “canción popular” no es otra cosa que la letra de una viejo tema musical que, por así decirlo, podríamos ubicar en los antecedentes del pop vernáculo berreta. Y si el lector no me cree que vea por sí mismo.

Ahora bien, ¿por qué he de morirme yo, que soy feo? Todos moriremos en algún momento pero francamente no se me da la gana morir por feo. Es más, desafío a quienes se piensan lindos a demostrar que valen más que este sujeto o cualquier otro de los feos del mundo, mayoría de los que habitamos el planeta, incluyendo animales de toda laya y, ya que estamos, vegetales también porque en esto del vivir contamos todos, hasta los líquenes.

¿Es el gusano un ser feo? Supongo que él podría tener otra óptica al respecto. ¿Qué es lo bello y qué lo feo?

Este asunto de la belleza es una cuestión para nada menor toda vez que hablamos de valores que no son estéticos solamente, los que -dicho sea de paso- son relativos. Y si alguien no comparte mi aseveración que proceda a digerir los tantísimos tratados de estética que el pensamiento humano ha sido capaz de producir a lo largo de la historia. Que yo sepa, al día de la fecha nadie ha dado con una definición absoluta, permanente e indiscutible al respecto. Y nadie la dará, por cierto, ya que hablamos de un valor relativo: la belleza, o la fealdad, que es lo mismo. No existe lo bello sin lo feo y viceversa.

En todo caso habrá momentos, y en un mismo tiempo, diferentes construcciones culturales. Así las cosas y poniéndonos en nuestro actual contexto, cabe reflexionar sobre algunos paradigmas de belleza en los que se insiste machacona y masivamente desde hace bastante tiempo por este lado del mundo, con tendencia a la profundización de los mismos, a costa de causar severos daños en centenares de miles de seres humanos, comenzando por los más jóvenes y terminando por quienes han decidido que para ellos el tiempo no ha pasado ni pasará, pretendiendo una eterna juventud que no sólo no se tiene ni existe, sino que lleva a muchos al ridículo y a veces, a la muerte en algún quirófano de dudosa seguridad.

Lo peor de todo es que, como en la canción, no se nos permite ser feos (es decir, es execrado quien no se mimetiza con este paradigma) y, por tanto, debe procederse a quitar costillas, inflar los labios, estirar la cara al punto de parecer El Guasón, teñir el cabello, colgar el culo de hilos vaya uno a saber atados dónde, inflar las tetas hasta lo inimaginable, cual pelotas de fútbol que saludan al observador como brazos abiertos haciendo caso omiso de la Ley de Gravedad, consumir toneladas de cremas, lociones y potingues varios, erogar fuertes sumas en tratamientos de toda laya, usar cuanto trapo ridículo, extraño y de talles exóticamente mínimos, se le ocurra imponer a algún loco misógino puesto a gurú de la moda, reemplazar el sobretodo por un automóvil rugiente y agresivo con cientos de botones y -para mí- lo peor de todo: imitar el triste, deplorable y burdo comportamiento de un zoológico humano que ha capturado los medios de comunicación, en los que a mayor procacidad y estupidez, mayor consideración y respeto por parte del mismo sistema quien, a su vez, lo inocula en la gente, esa que, si es fea, se va a morir en serio, ya que la decepción de no poder “ser como” deprime, desasosiega.

Demasiada imagen externa o proyectada. Extrema reducción del pensamiento, pérdida inconciente de la libertad, masificación fatal. En suma, robo de la posibilidad de sentir la felicidad de ser como se es.

Vuelvo al gusano. ¿Y si el tipo se convierte en mariposa? ¿Será bello entonces? Suponemos que sí, sólo lo suponemos. De lo que estamos absolutamente seguros es que en versión mariposa el gusano es efímero.

Por último ¿Notaron el sesgo machista del sesudo texto de la canción que inicia este post? El tipo se morirá aunque no es tan feo y “ni modo”. Por el contrario, ella va a reventar por “roñosa y antigua”. Ergo, los tipos podemos dar asco pero tenemos una pista de aterrizaje: somos incomprendidos y no tan feos. La féminas, sin embargo, son antiguas (traducción: no se dejan) y, por tanto, roñosas. ¿No será demasiado?

9/8/08

Acerca de las oportunidades

Hay sociedades que se empecinan en desaprovechar las oportunidades que se le presentan. Otras no sólo son incapaces de percibir la oportunidad sino que se esmeran en derrochar y envilecer sus valores.
En la Argentina sabemos de esto, me parece, mal que nos pese. Sin embargo, también aquí no son pocos los que saben de valores y oportunidades. Sobran ejemplos, aunque muchas veces desarticulados entre sí.
Pienso que nos haría muy bien enfocar nuestra mirada hacia esos ejemplos, por más que nos insistan en confundir lo popular con populismo vacío de contenidos. En otras palabras, ya es tiempo que comencemos su articulación.
A quien le interese, invito a leer (o repasar) el artículo que la revista del diario La Nación, de Buenos Aires, publicó el domingo 3 de agosto pasado acerca de la Universidad Nacional de La Matanza.
Antes, una apostilla sobre el título de la nota, "Historia de un sueño". Curioso. Parece que lo que debería ser normal y corriente, aquí se ha tornado en un sueño, en este caso felizmente hecho realidad.
Algo huele mal en Dinamarca...

Educación Historia de un sueño

2/8/08

James Brown

Hace 37 o 38 años yo era un joven que recién asomaba a la vida universitaria. Entonces, como ahora, la música me apasionaba. Toda la música. Así y todo, admito que estaba enfrascado en el jazz, el blues y -como era de esperar- el rock.
Un día de esos se me presentó la oportunidad de trabajar como DJ en un "boliche". Allí la música no pasaba -salvo excepciones- por los géneros mencionados. El soul reinaba a sus anchas. Pero había otra música, negra también, que andaba dando vueltas por ahí y, en lo personal, me impactó. Son muchos los artistas que pueden ser mencionados pero uno era (y es) "El Rey". James Brown.